Así que ya hemos decidido la acción que vamos a llevar a cabo: el envío de una nota de prensa a distintos medios a través del correo electrónico. Vamos a comenzar la redacción de dicha nota.
Lo primero es decidir el título (o sea, el breve texto que aparecerá en la casilla ASUNTO en el gestor de correo de los receptores). Esas pocas palabras decidirán el destino de nuestra nota de prensa.
Verás, l@s periodistas no son muy distintos a ti. Son gente muy ocupada y que realiza su labor bajo una gran presión. Diariamente deben encontrar noticias que interesen a sus lectores, contenten a sus jefes y respeten la línea editorial del medio para el que trabajan.
El tic tac del reloj les resulta tan implacable como a cualquiera de nosotros. Su correo amanece con decenas de mensajes, la mayoría no solicitados. Sabe que en alguno de ellos puede que encuentre material interesante, algo que les permita desarrollar un buen artículo. Pero también sabe que el resto es algo muy parecido al detestable SPAM.
Para decidir a cuales de esos mensajes dedicarán un poco de su valioso tiempo (no hay ironía alguna en esta expresión), sólo disponen del título. Bueno, y del nombre de quien lo envía, pero esa es otra historia. Aquellos mensajes que consigan despertar su curiosidad serán abiertos. El resto irá a parar a la papelera de reciclaje.
Imaginemos que hemos decidido titular a nuestra nota de prensa: “Lanzamiento de un nuevo libro de gestión empresarial”. ¿Cuál crees que será su destino más probable? En efecto: papelera.
Otro posible título: “Creo que esto te puede interesar”. No está mal del todo. Pero, por desgracia, es el título de seis o siete de cada diez mensajes que le llegan. Papelera.
En nuestro caso, hemos decidido utilizar para la nota de prensa el propio título del libro: “Guía para negociar con ánimo de lucro”. Confiamos en que sea lo suficientemente original y llamativo como para que abra el mensaje. Sin embargo, ciertos estudios afirman que los títulos cortos se abren más que los largos. Así que decidimos acortarlo un poco: “Negociando con ánimo de lucro” será el título definitivo.
El remitente será, por supuesto, El Sindicato Clandestino. También esperamos que este nombre llame su atención.
Observa que hemos dicho “confiamos”, ”esperamos”… No tenemos forma de saber, de antemano, si esto será así. Lo “suponemos”, pero sólo sabremos si funciona cuando llevemos a cabo la acción. Por eso es buena idea hacer siempre una prueba con unos cuantos medios antes de emplearnos a fondo. Pero la cuestión de “a quién enviar la nota de prensa” será tema de una próxima entrada.
Por ahora, ya tenemos el título. En el siguiente post os hablaremos del contenido del comunicado.
Hasta entonces.
ESC
Lo primero es decidir el título (o sea, el breve texto que aparecerá en la casilla ASUNTO en el gestor de correo de los receptores). Esas pocas palabras decidirán el destino de nuestra nota de prensa.
Verás, l@s periodistas no son muy distintos a ti. Son gente muy ocupada y que realiza su labor bajo una gran presión. Diariamente deben encontrar noticias que interesen a sus lectores, contenten a sus jefes y respeten la línea editorial del medio para el que trabajan.
El tic tac del reloj les resulta tan implacable como a cualquiera de nosotros. Su correo amanece con decenas de mensajes, la mayoría no solicitados. Sabe que en alguno de ellos puede que encuentre material interesante, algo que les permita desarrollar un buen artículo. Pero también sabe que el resto es algo muy parecido al detestable SPAM.
Para decidir a cuales de esos mensajes dedicarán un poco de su valioso tiempo (no hay ironía alguna en esta expresión), sólo disponen del título. Bueno, y del nombre de quien lo envía, pero esa es otra historia. Aquellos mensajes que consigan despertar su curiosidad serán abiertos. El resto irá a parar a la papelera de reciclaje.
Imaginemos que hemos decidido titular a nuestra nota de prensa: “Lanzamiento de un nuevo libro de gestión empresarial”. ¿Cuál crees que será su destino más probable? En efecto: papelera.
Otro posible título: “Creo que esto te puede interesar”. No está mal del todo. Pero, por desgracia, es el título de seis o siete de cada diez mensajes que le llegan. Papelera.
En nuestro caso, hemos decidido utilizar para la nota de prensa el propio título del libro: “Guía para negociar con ánimo de lucro”. Confiamos en que sea lo suficientemente original y llamativo como para que abra el mensaje. Sin embargo, ciertos estudios afirman que los títulos cortos se abren más que los largos. Así que decidimos acortarlo un poco: “Negociando con ánimo de lucro” será el título definitivo.
El remitente será, por supuesto, El Sindicato Clandestino. También esperamos que este nombre llame su atención.
Observa que hemos dicho “confiamos”, ”esperamos”… No tenemos forma de saber, de antemano, si esto será así. Lo “suponemos”, pero sólo sabremos si funciona cuando llevemos a cabo la acción. Por eso es buena idea hacer siempre una prueba con unos cuantos medios antes de emplearnos a fondo. Pero la cuestión de “a quién enviar la nota de prensa” será tema de una próxima entrada.
Por ahora, ya tenemos el título. En el siguiente post os hablaremos del contenido del comunicado.
Hasta entonces.
ESC
3 comentarios:
Anónimo dijo...
Interesante serie de post. La seguiré con atención.
ESC dijo...
Nos parece muy bien. Cuando esté completa, te recomendamos que imprimas juntas todas las entradas de este tema y tendrás algo así como una "Guía para hacer notas de prensa con ánimo de lucro".
ESC
Anónimo dijo...
Ameno,interesante, divertido y sobre todo muy instructivo.Creo que es un libro que todos deberiamos tener, ya que negociar se ha convertido en todo un arte. Raque